Caída del Pelo en los Gatos

La caída del pelo en los gatos es un problema frecuente que no siempre se puede tratar. Los gatos pierden pelo a diario. Eso realmente no es un problema, ya que lo regeneran rápidamente y el proceso les sirve para protegerse frente a la acumulación bacteriana. Sin embargo, existen ciertos límites que pueden indicar que el animal está teniendo algún tipo de problema.

 La muda natural de los gatos suele ser estacional. En algunas épocas del año es común encontrarse con pelos del gato por todos los rincones de la casa. Una de las mejores formas para prevenir ese tipo de situaciones es mediante el cepillado diario de los animales.

Con ese acto tan higiénico también se previene frente a la acumulación de bolas de pelo en sus cavidades abdominales, que a la larga pueden volverse muy perjudiciales. Como es evidente, las razas de cabello más largo y rizado necesitarán medidas adicionales. En caso de que la caída del pelo en los gatos sea repentina o de forma excesiva podría considerarse que el animal está sufriendo algún tipo de problema. Lo más recomendable en esos casos es llevar a la mascota al veterinario para que le realice un diagnóstico preciso y certero con una solución para tratar la patología.

Generalmente esas caídas de cabello abruptas se deben a determinadas situaciones de estrés. Una de las más comunes es la inserción de un nuevo individuo en el territorio que el felino ha delimitado. Introducir una nueva mascota en el hogar debe hacerse delicadamente para garantizar la salud de todos los ejemplares. En conclusión, es normal que los gatos pierdan pelo constantemente, pero en algunos casos en el que hay un exceso es necesario tomar medidas preventivas como visitar al veterinario, intentar reducir el estrés al que se ve sometido la mascota y alimentar al animal con un pienso específico para minimizar los daños de las temidas bolas de pelo.