Cólicos en los Caballos

Aunque los  cólicos en los caballos no son una enfermedad demasiado común, algunos ejemplares pueden verse afectados. Se trata de una afección que provoca un gran dolor abdominal. Algunos animales experimentan grandes molestias causadas por la hinchazón. Existen diversos tipos de cólicos equinos. Independientemente de la variedad, el cólico debe ser tratado como una emergencia. Si se sospecha que el caballo está mostrando síntomas de un cólico o si el animal sufre un problema digestivo similar hay que buscar asistencia veterinaria inmediata. Existen diferentes opciones de tratamiento para los caballos que sufren un cólico, pero esta es una enfermedad cuya evolución y tratamiento realmente pueden variar en cada caso. Como se señaló anteriormente, hay varias formas de cólico equino.

Sin embargo, mayoría de los caballos con esta condición muestran ansiedad, dolor agudo en el abdomen, sudoración excesiva, pulso excesivamente alto, ruidos agudos en el intestino, micción excesiva y frecuentes intentos de acostarse. A parte del nefrítico, existen muchos más cólicos.

El de tímpano produce hinchazón. El espasmódico hace que tengan mucha transpiración, que sientan dolor en el estómago y que se muestren inquietos. El cólico obstructivo es una de las variantes más graves y produce heces secas, fiebre intensa, dolor abdominal, pulso alterado, dificultad a la hora de ingerir, colon impactado, descenso de la temperatura y mucosas excesivas. Las causas de la aparición cambian en cada caso. El cólico del tímpano se produce cuando el material alimenticio se aloja en el estómago. Generalmente sucede en los caballos que comen hierba verde o grano grueso. El cólico espasmódico surge cuando las larvas de gusano viajan a través del intestino. Eso daña los vasos sanguíneos y causa la acumulación del contenido del estómago debido a la falta de concentración normal. La deshidratación y la falta de elementos como el cloro u el sodio también pueden facilitar la aparición de ese tipo de cólico. Por otro lado, el cólico obstructivo surge cuando los caballos comen en exceso especialmente alimentos secos. Además, también puede surgir por tumores intestinales o por cambios bruscos en la dieta.

Usted debe tratar de familiarizarse con los síntomas del cólico para identificar rápidamente el estado del animal. En la mayoría de los casos simplemente escuchar los sonidos del intestino del caballo puede ayudar a confirmar su sospecha. Entonces hay que acudir rápidamente al veterinario, quién tomará la temperatura y otros signos vitales para comprobar el estado de la mascota. Dependiendo del tipo de cólico hay diferentes opciones de tratamiento. Los analgésicos, por ejemplo, se utilizan para ayudar a controlar el dolor asociado con el cólico del tímpano ya que con ello se mejora el temperamento del caballo. Los medicamentos pueden ser utilizados para controlar las contracciones del intestino. Se puede utilizar un tubo gástrico para aliviar la cantidad de presión de gas en el intestino.

Los sedantes, mientras tanto, a menudo se utilizan en el tratamiento del cólico espasmódico que ya que las contracciones hacen que se vuelvan muy inquietos y en ocasiones agresivos. Dado que en muchos casos el problema es creado por un parásito, su eliminación es también importante en la curación de la enfermedad. Los caballos con el tipo más severo de cólico como lo son los cólicos obstructivos debe ser revisados por un veterinario de inmediato. Eso puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte. A menudo el único remedio para los cólicos obstructivos es recurrir a los métodos quirúrgicos. La parafina líquida y las soluciones salinas administradas con una sonda gástrica también pueden ayudar a aflojar el bloqueo intestinal. Los masajes rectales son otra opción para los caballos con cólico obstructivo, ya que pueden  ayudar a suavizar la obstrucción.