La rosa de jericó, cuyo nombre científico es anastatica hierochuntica, es una planta originaria del desierto que tiene la capacidad de resucitar tras muchos años de sequía absoluta. Eso la convierte en una especie única e increíble, que ha llamado la atención de la gente desde tiempos inmemorables. Es originaria de Arabia, Palestina, Egipto y las inmediaciones del Mar Rojo.
Se trata de una planta increíblemente resistente a la desecación. Sus ramas se contraen con la sequedad y permanecen cerradas durante muchos años manteniéndose en una especie de letargo, pero cuando vuelven a hidratarse o a recibir el agua suficiente recobran la vida consiguiendo de nuevo toda su frescura. Cuando permanece en su estado de sequedad se transforma en una especie de esfera, que se abre de nuevo al ser introducida en el agua formando una especie de flor.
Su forma ovalada y su peso ligero hace que el viento la arrastre grandes distancias por el desierto hasta encontrar lugares donde hay agua, dejando semillas por todo su recorrido y haciendo que se propague por una gran cantidad de sitios diferentes. La rosa del desierto sirve para muchas cosas diferentes y se le atribuyen muchas cualidades en función de las diferentes culturas o creencias. Antiguamente se utilizaba para adivinar el tiempo, ya que la planta actúa a modo de higrómetro ya que las hojas se mantienen más o menos vivas en función de la humedad del ambiente.
Por lo que los sabios podían predecir qué tiempo haría en un determinado momento. De forma histórica también se ha empleado como planta de la suerte. Hay constancia que en Arabia se utilizaba como un preciado talismán para bendecir las casas y los negocios, de ahí hoy en día siga utilizándose para atraer el dinero y la suerte. Visita las diferentes secciones de nuestro vivero online.
Planta Rosa de Jericó
La planta rosa de jericó se puede encontrar seca o viva, en forma de rosetón. Los ocultistas desde tiempos inmemorables la han utilizado a modo de planta sacra y a modo de planta mágica. Se emplearon por los alquimistas, ya que se creía que se alimentaba de las energías del lugar en el que estaba, absorbiendo así todas las malas energías y dejando en su entorno toda la energía positiva. Se conoce con el nombre de planta de la resurrección o doradilla.
Entre esos usos mágicos que siempre se le han atribuido destaca la capacidad de proteger las casas y de atraer la suerte. Siempre se ha empleado para bendecir nuevos negocios. También uno de sus usos es atraer el dinero y el amor. Se dice que tiene propiedades similares a las plantas medicinales, ya que también se creía que mejoraba el estado de salud.
Pero se empleaba especialmente para la prosperidad económica y la suerte de los miembros del hogar. También es conocida como planta sagrada o rosa de ariha. En algunos lugares también es llamada flor divina. Tal es la fuerza que desprende la rosa de jericó que en muchos comercios, casas e iglesias hoy en día se sigue empleando para atraer la buena suerte, por lo que consigue unir un poco la magia con la religión. Aprovecha las ofertas y hazte con una ahora mismo.